Como esas casas viejas

Hay veces que me siento como esas casas viejas
lleno de hollín de sueños,de polillas de angustias
y un perfume remoto de aquellas cosas mustias,
que se ahuma el recuerdo y se va por las tejas.

En un rincón obscuro que se presiente apenas,
disimula telares la araña de mis ansias,
y en esa pantomima de coser las distancias,
va tejiendo esperanzas con hilachas de pena.

Me siento muchas veces, como esas casas viejas,
que se les sale el alma por las puertas añejas,
bostezando agonías de un capricho vivido;

Queda un jardín oculto con capullos de espera,
mil surcos de amarguras con brotes de quimera,
tras una verja inmensa,con portones de olvido.

I. Dávila López


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Dylia©Marita


2006